Entre el año 2007 y 2008 se llevó a cabo una intervención arqueológica muy importante en la calle La Fuente, al norte de la Iglesia de San Bartolomé.
Tras la excavación se hallaron restos del taller artesanal de Villa Petraria, con las diferentes dependencias en las cuales se trabajaba en la construcción de ladrillos y tejas, almacenes y tres hornos distintos donde se llevaba a cabo la cocción de la arcilla.
Este barrio artesanal se encuadra cronológicamente entre los siglos III y IV d.C.
A día de hoy, aún se conserva intacto uno de estos hornos, en proceso de rehabilitación, y que abrió sus puertas en la primavera de 2015.