El día 30 de Enero, se celebra el Día Escolar de la No Violencia y la Paz: una jornada de reflexión y educación sobre la importancia de propiciar la paz y afrontar los conflictos sin que sea la violencia la norma, pues a pesar del esfuerzo de las personas educadoras y de las entidades sociales que tratan de fortalecer la cultura de la paz, la dinámica de guerra sigue inundando todo el mundo.
Muchas de las personas que conforman la Plataforma Villena por la Paz han trabajado durante años en la preparación de esta jornada, ofreciendo a la población actividades de convivencia y de encuentro, junto a fórmulas para buscar soluciones que permitan afrontar los conflictos desde la razón y el acuerdo, y no desde la imposición y la fuerza. Todas ellas junto a muchas personas más han entendido, como declaraba Gandhi (en cuya memoria se celebra este día) que “no hay camino que lleve a la paz, sino que la paz es el camino”.
Desgraciadamente un año más, mientras numerosos centros educativos españoles se preparan para celebrar este día, la trágica realidad se impone en más de 40 países en los que la guerra y las violaciones de derechos humanos provocan terror y sufrimiento.
Ucrania y la Franja de Gaza están el centro de toda la preocupación contra la guerra en Occidente, pero desgraciadamente otros lugares como Sudán, Nigeria, Congo, Sáhara, Yemen, Libia, Myanmar o Afganistán siguen ofreciendo una realidad de opresión y muerte sobre toda la población, sobre algunos grupos étnicos o sobre la mujer en particular. Intereses geoestratégicos, supremacismo étnico, prejuicios religiosos, control de recursos o los efectos sobre el territorio causados por el cambio climático son el origen de las guerras, que produjeron el pasado año cerca de 300 mil muertes (unas de 800 personas asesinadas al día).
Con sus actuaciones, la Plataforma Villena por la Paz quiere hacer presente los conflictos olvidados que muchas veces pasan de largo bajo los intereses de los países más ricos, y sobre todo, de las empresas que se lucran con el comercio de armas, quienes generan beneficios a costa de la sangre de miles de víctimas. No olvidemos que se estima en más de 100 mil millones de euros el comercio de armas y en más de 2 billones de euros el gasto militar mundial, mientras que casi 800 millones de personas pasan hambre. Dinero y recursos que podrían ser destinados a las personas que carecen de alimento, a la educación, la sanidad o la gestión del agua y el territorio si se abogase por soluciones pacíficas y dialogadas que, a pesar de parecer ser tan difíciles de llevar a cabo, reportan grandes beneficios y refuerzan nuestro sentimiento de humanidad.
Plataforma Villena por la Paz