La prueba de acceso a la universidad el próximo mes de junio será similar a la de los últimos años, pero incorpora dos grandes novedades: el alumnado podrá elegir examinarse entre Historia de España o Historia de la Filosofía y ambas asignaturas servirán, además, para subir nota en la fase de admisión.
El último borrador de la orden ministerial que regulará el examen para el curso 2023-2024 será aprobado en pocas semanas y, en principio, no sufrirá más modificaciones.
El alumnado de 2º de bachillerato, el primero que ha estudiado con la Lomloe, más conocida como ley Celaá, deberá tener en cuenta lo siguiente:
Materias de las que se examinarán
Lengua Castellana y Literatura II, Lengua Extranjera II, la materia específica obligatoria de la modalidad escogida para la prueba y, si la hubiere, Lengua cooficial y Literatura II.
Además, deberá examinarse de Historia de España o Historia de la Filosofía, a su elección.
En cumplimiento de la Lomloe, el alumnado deberá elegir entre Historia de España o Historia de la Filosofía, ya que con el nuevo currículo son materias troncales y en la prueba se ha querido mantener el mismo número de asignaturas.
Finalmente serán los habituales 90 minutos en lugar de los 120 que se barajaron en un principio para 2024.
Se hará una prueba por cada una de las materias objeto de evaluación y habrá una única propuesta de examen con varias preguntas.
Se establecerá un descanso entre pruebas consecutivas de, como mínimo, media hora.
La evaluación tendrá, preferentemente, una duración de un máximo de cuatro días. En las comunidades con lengua cooficial será de un máximo de cinco días.