El Ayuntamiento de Alicante lleva a junta de Gobierno adjudicar al Consejo de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de la Comunidad Valenciana la redacción del ‘Plan de acción, impulso y modernización del Comercio y los Mercados de Alicante’, con una oferta de 80.795 euros y un plazo de un año, que ha sido impulsado por la concejalía de Comercio y Mercados.
La concejal de Comercio, Lidia López, ha puesto en valor “la importancia de tener este plan estratégico”, destacando que “es un documento fundamental para revitalizar y establecer la consolidación de un tejido sectorial comercial más sólido y con capacidad para crear empleo de calidad en la ciudad, y poder situarlo en el mapa de turismo de compras con una estructura comercial equilibrada y competitiva”.
La elaboración del documento consta de tres fases para cada una de las variantes del ámbito del plan tanto del comercio en general como de los mercados municipales. La primera fase es de información, y se van a llevar a cabo y realizar los trabajos de campo, dinámicas y extracción de información. Así como con posterioridad se ejecutará el análisis y diagnóstico, con el estudio de la información recabada obteniendo las conclusiones respecto a aspectos sociales, económico-comerciales, urbanísticos, hábitos de consumo, demanda potencial, estructura y características de la oferta comercial que inciden en el desarrollo comercial del municipio, con un DAFO estructurado.
Con este plan tal y como ha informado Lidia López, se quiere “modernizar el sector y estudiar en profundidad las tendencias de consumo con el objetivo de modernizarlo posicionarlo internacionalmente en el mapa de turismo comercial, así como ver su evolución para identificar sus debilidades y fortalezas e impulsar medidas e iniciativas que faciliten la dinamización e impulso tanto de nuestros comercios como mercados en nuestra ciudad”.
Así como ha explicado la concejala Lidia López que en una última fase del estudio “se van a elaborar tanto propuestas como líneas estratégicas que van a estar alineadas con los objetivos europeos de desarrollo sostenible, y dirigidas a elaborar un modelo comercial sostenible que incremente el atractivo del municipio y lo posicione”.
El ámbito del Plan se ejecuta en todo el comercio del municipio de Alicante, y en los cuatro mercados municipales el Central, Mercado de Carolinas, Mercado de Benalúa y Mercado de Babel, con el objetivo de analizar la evolución sufrida por el comercio de la ciudad y los mercados en el periodo 2005-2021, y diseñar las propuestas para potenciar el comercio de la ciudad y modernización de los mercados municipales.
Esta es una iniciativa que tiene entre sus objetivos cuantificar las cifras de demanda comercial del municipio: gasto comercializable, gasto turístico, gasto de la hostelería, así como la oferta del municipio y analizar su calidad y proyección. De la misma forma se llevará a cabo en el estudio un amplio análisis DAFO para identificar las debilidades, fortalezas y oportunidades que presente la actividad comercial de la ciudad, en relación a sus factores internos y a los cambios en el contexto, ya sean de carácter empresarial, territorial, social, normativo, de forma diferenciada por un lado el comercio y por otro los mercados.
Identificar los factores clave para el desarrollo comercial
El equipo de Gobierno con la edil de Comercio a la cabeza lleva trabajando varios meses para poder sacar adelante el plan estratégico de los comercios y mercados, y con el mismo como explicó Lidia López se va a lograr “caracterizar las pautas y tendencias de compra de la población residente, visitantes, identificando los factores clave que más inciden en el desarrollo comercial de la ciudad y las demandas no satisfechas de los consumidores detectar el grado de adecuación del tejido comercial existente a la demanda presente y futura, mediante la realización de análisis prospectivos de evolución de distintas variables”.
El estudio también busca analizar el espacio urbano en el que se asienta el comercio, los ejes comerciales, las plazas, los equipamientos, y en definitiva todos los espacios soporte de la actividad comercial y de servicios de la ciudad, con el fin de identificar sus problemas urbanísticos y proponer actuaciones de mejora.
De este modo, según ha señalado la edil Lidia López cuando esté finalizado “se va a desarrollar un modelo comercial sostenible más adecuado para el municipio, que permita que el comercio local se desarrolle en las mejores de condiciones de equilibrio, eficacia y accesibilidad, satisfaciendo las necesidades de los consumidores y reforzando la función de la actividad en el desarrollo económico y social de la ciudad y su proyección en el exterior”.