La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha destacado que el nuevo Centro específico para personas con enfermedad mental crónica (CEEM) de Alcoy “dará servicio residencial a las personas con enfermedad mental hasta que estén en disposición de poder llevar a cabo su proyecto de vida independiente”.
En este sentido, ha informado que la Conselleria tiene previsto “que a finales del mes de septiembre o principios del mes de octubre empiecen a entrar las primeras personas usuarias”.
Oltra ha realizado estas declaraciones durante su visita a Alcoy, donde ha recorrido las instalaciones de este centro acompañado por el alcalde de la ciudad, Toni Francés, y miembros de la corporación municipal.
Se trata de “un centro muy esperado por la ciudad de Alcoy, que nos permitirá dar este servicio que necesita la ciudadanía” en un momento, además, en el que “se está hablando mucho de la salud mental, ya que la pandemia ha agravado mucho estas situaciones”.
La vicepresidenta ha explicado que su Departamento ha destinado una subvención de 3.268.620 euros a estas instalaciones a lo que se suma otros 349.192 para equipamiento, todo ello dentro del Pla Convivint de Infraestructuras Sociales de la Generalitat.
Este centro residencial cuenta con 40 plazas organizadas por unidades de convivencia “para personas que requieren este tipo de recursos en una etapa de su vida, hasta que tengan autonomía suficiente para poder volver a su comunidad en unas condiciones de habilidades y autonomía suficientes”.
Residencia Mariola
Durante su visita a Alcoy, la vicepresidenta también ha firmado la renovación del acuerdo con la Fundación Mariola para la gestión durante un periodo de 15 años más de la residencia de personas mayores Mariola, de la que es titular la Generalitat.
Oltra ha informado que la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas tiene previsto invertir, también a través del Pla Convivint, de un millón de euros para dotar al centro de habitaciones con menor ocupación y adaptar sus instalaciones a la experiencia adquirida durante la gestión de la pandemia.
Oltra ha resaltado que, tanto el CEEM “Mossén Cirilo” como la residencia Mariola son dos muestras del “impulso sin precedentes” que supone el Pla Convivint a la construcción de centros públicos y a la mejora de instalaciones sociales que llevaban años sin ningún tipo de reforma, y que ahora se adaptarán “a los nuevos modelos convivenciales que incluyen los aprendizajes adquiridos durante la COVID-19”.
En este sentido, ha recordado que el objetivo principal del Plan Convivint es dotar a la Comunitat de una oferta de recursos públicos acorde a sus necesidades, “que ponga fin al déficit de plazas públicas en todos los sectores arrastrado durante años”, y con la puesta al día y creación de prestaciones dignas y un nuevo modelo de servicios sociales “centrado en la proximidad, municipalismo y ordenación de competencias”.
Servicios sociales municipales
Oltra ha aprovechado también la visita a Alcoy para reunirse con el equipo de servicios sociales del municipio, a quienes ha felicitado “por su buen hacer, su profesionalidad y compromiso” con el nuevo modelo de atención a la ciudadanía a través de uno servicios sociales “dignos y de calidad”.
En este sentido, Mónica Oltra ha destacado la “estrecha colaboración” de su departamento con el Ayuntamiento de Alcoy que ha permitido reforzar la atención primaria, que es “la cuarta pata del estado de bienestar”.
Esta colaboración se ha traducido en un aumento progresivo en los últimos años del presupuesto dirigido a los programas de los servicios sociales municipales de Alcoy, que ha pasado de 70.096 euros destinados entonces a los 792.350 euros de financiación de este año, lo que supone un 1.030% más inversión.
Este aumento presupuestario ha permitido multiplicar x11 la capacidad de contratación de profesionales, posibilitando la ampliación de la plantilla de personal de los equipos de servicios sociales para conformar un equipo multidiscipliar con distintos perfiles.
De esta forma, “ahora tenemos una ratio de un profesional especializado en servicios sociales por cada 1.000 habitantes, mientras que en 2015 esta proporción era de uno cada 23.000 habitantes, lo cual era inabarcable”, ha apuntado.
En estos momentos el equipo del Ayuntamiento cuenta con 37 trabajadores y trabajadoras, en concreto 4 psicólogos o psicólogas, 4 técnicos o técnicas de integración social, 6 educadores o educadoras, 10 trabajadores o trabajadoras sociales, 2 asesores o asesoras jurídicas y 11 personas de perfil administrativo.