Acaban de nacer oficialmente como colectivo organizado, y ya se suman con fuerza a animar las calles y plazas del municipio como mejor saben: con música y cantos. La Asociación Cultural “Amigos Rocieros de El Campello”, aportó ayer una actuación de su “Coro Romero Verde” a la jornada lúdico-festera que se celebró en la Plaza de la Iglesia, que incluía diversión infantil y nevada.
Cuando los cañones dejaron de lanzar copos, ellos y ellas ya estaban preparados, y como en Navidad estamos, tocaba villancicos, al son de las guitarras, panderetas, cascabeles y cajones de música. Era la segunda edición de “Zambomba navideña”, y por supuesto no faltaron esos instrumentos tan entrañables que por aquello de la tradición utilizamos casi con exclusividad en estas fechas. Es un instrumento musical popular consistente en un cilindro hueco de barro, madera o metal, cerrado por la parte superior con una piel tirante a la que se sujeta en el centro una varilla que, cuando se mueve con la mano en dirección vertical, transmite una vibración a la piel, con lo que se produce un sonido ronco y grave.
Pero no cantaron solos. El público rodeó al grupo, y se unió a entonar los villancicos más tradicionales, anunciando que, ahora sí, empezaba la Navidad en El Campello.