Juan Pascual Azorín Soriano, alcalde de Elda entre 1996 y 2007, emocionó anoche a los numerosos eldenses que comparecieron en la Plaza de la Constitución a escuchar su pregón de Fiestas Mayores 2024.
RECEPCIÓN DEL ALCALDE: Previo al pregón, tuvo lugar la ya tradicional Recepción en el Casino Eldense que el alcalde Rubén Alfaro Bernabé, celebra y al que asisten muchísimos representantes de muy diversos colectivos de la sociedad civil eldense. Unas 300 personas asistieron a la misma y buena parte de ellas subrayaron la necesidad de celebrar un evento como el de la Recepción Municipal que posibilita el reencuentro de muchísimas personas que celebran la llegada un año más de las Fiestas Mayores de Elda.
El alcalde Alfaro, en su disertación, agradeció a Antonio Martínez, presidente del Casino Eldense, que siempre tiene las puertas abiertas para la ciudad.
Azorín comenzó hablando de que se sentía como “un niños con zapatos nuevos”, y sobre esta frase giró el segmento inicial de su pregón en el que habló de sus vivencias de niño tras llegar a Elda con apenas 18 meses de vida. Reconoció que se sentía orgulloso de lo que había sido: cortador, encargado de tráfico, dirigente sindical, concejal, alcalde y ahora también abuelo.
“Eldear” es un verbo que inventó un Hijo Predilecto de Elda, Joaquín Planelles, y anoche en la Plaza del Ayuntamiento eldense, Juan Pascual Azorín supo “eldear” con pericia en un pregón muy elaborado y repleto de estampas y vivencias eldenses en general y de las Fiestas Mayores en honor a la Virgen de La Salud y el Cristo del Buen Suceso en particular.
Azorín hizo especial hincapié en el año 2004 cuando se conmemoró el Centenario de la ciudad y también el 400 aniversario de la llegada a Elda de las imágenes de los Santos Patronos. Fue muy agradecido con las personas que colaboraron con él en el éxito de la conmemoración de esas dos grandes efemérides.
Al filo de las doce menos cinco, el ex-alcalde concluyó su pregón con los tradicionales vivas, a la Virgen de la salud, al Cristo del Buen Suceso, y a Elda. El público presente le dedicó una sonora ovación.
Minutos después, el propio Azorín prendió la llama de la traca que va desde la Plaza a la Iglesia de Santa Ana hasta convertirse en una espectacular Palmera. Posteriormente, los ciudadanos y las ciudadanas eldenses se dirigieron a Santa Ana que les recibió con un pronunciado olor al tradicional espliego.
Después de la preceptiva visita a los Santos Patronos, la comitiva se trasladó a los jardines del Vinalopó, acompañados de la Asociación Músico-Cultural Eldense Santa Cecilia para asistir a un precioso Castillo de Fuegos Artificiales.
MIGUEL SANTIAGO RICO PAYÁ