El Ayuntamiento de Ibi ha instalado un sistema de control para acceder al casco antiguo gracias a cámaras de reconocimiento de matrículas que para cuando se llevan a cabo los períodos de peatonalización de las calles ayuden a ajustar la movilidad. Este sistema, pese a estar instalado, tardará varios meses en establecerse y funcionar.
La intención de este sistema, enmarcado en el Plan de Movilidad Urbana, es eliminar las vallas amarillas que la Policía instala para cerrar las calles al tráfico, intentando de esta forma que nadie se vea perjudicado y se pueda incorporar a las calles un sistema que concilie las necesidades de todos los ciudadanos. Las personas que estén autorizadas para acceder al centro podrán entrar gracias a una aplicación móvil que subirá y bajará los bolardos de forma rápida. Ibi tratará de reducir el consumo de energía con esta actuación en la movilidad urbana.
El concejal de Urbanismo, Santiago Cózar, explica que “ahora hay que comenzar un arduo trabajo de recopilación de datos, para que todos los vecinos residentes y los establecimientos ubicados en el centro nos faciliten sus datos para incorporarlos al sistema”.