Esta tradición centenaria comenzó como una celebración pagana, donde nuestros antepasados pastores, hacían fatxos en la Serra dOnil para iluminarse y dar calor a sus hogares durante el frío, posteriormente esta celebración pagana se convirtió en fiesta religiosa cristiana en Onil, con el fuego como elemento purificador, donde todos los años se ruedan fatxos encendidos haciendo molinillos, como inicio de la Navidad y con el simbolismo de darle calor al Niño Jesús o “Jesuset”.
Además le ofrecemos en el siguiente video parte de los preparativos del belén que se ubica en el lugar tradicional de este municipio.