En 2024, la Fundación AAP rescató a 82 mamíferos exóticos de condiciones inadecuadas y a menudo terribles, para darles un futuro mejor. Esto supone un 21% más de los 68 animales a los que pudimos ofrecer un lugar adecuado en 2023, en uno de los dos centros de rescate de la organización.
La mayoría de los animales rescatados eran mantenidos como animales de compañía exóticos por parte de particulares. Hablamos de caracales, servales, petauros del azúcar o degúes. Además, AAP rescató también animales de circos, como los 12 leones, nueve de ellos crías, llegados de Francia. Sin olvidar los animales rescatados del tráfico ilegal.
Un nuevo futuro |
El Top-3 de países de origen de los rescates es Países Bajos, Francia y España, aunque los rescates se han realizado en un total de siete países diferentes de la UE. Al mismo tiempo, AAP pudo reubicar 108 animales en santuarios y parques zoológicos de renombre, asegurando un hogar definitivo para ellos en lugares con la capacidad y experiencia necesarias. A finales de año quedaban 374 animales en nuestros centros de rescate de Villena y Almere (Países Bajos), 50 menos que a principios de año.
Incremento de solicitudes de rescate
En 2024, AAP recibió 1.478 solicitudes de rescate y alertas de animales exóticos en situaciones de vulnerabilidad, procedentes de más de 10 países. Esto supone un incremento de más de un 25% respecto a 2023. La mayoría de los informes, más del 58%, fueron de mamíferos exóticos de pequeño tamaño, como degúes, perritos de las praderas y, el cada vez más popular, petauro del azúcar. En 2024 fueron notificados 87 de estos animales, suponiendo un incremento exponencial en las solicitudes de rescate de esta especie, comparado con años anteriores.
Más petauros que nunca |
Con ello, el petauro del azúcar ha pasado a ser el animal con más solicitudes de rescate de la lista de espera de la organización, superando al serval (2023) y a los degúes (2022) en el primer puesto. Los petauros del azúcar, aparecen frecuentemente en videos de redes sociales como TikTok siendo lanzados con fuerza al aire para demostrar su habilidad de planear, sin tener en cuenta su condición de animales nocturnos o el estrés y maltrato que esta práctica forzada supone para los animales. Siendo además animales totalmente inadecuados como animales de compañía.
El resto de las denuncias han sido sobre primates y grandes simios (casi el 19%), mamíferos de mayor tamaño como servales, mapaches y caracales (15%) y grandes felinos, incluidos leones y leopardos (7%).
Listado Positivo de animales de compañía
La legislación de España recoge en su Ley 07/2023 la regulación de los animales de compañía a través de una Lista Positiva, que se encuentra actualmente pendiente de desarrollo. En dicha lista, que dependerá de un Comité Científico-Técnico, se recogerán las especies permitidas como animales de compañía, quedando prohibidas todas las demás, facilitando tanto a particulares como fuerzas del orden, la identificación clara y concisa de qué animales de compañía son legales o no. Las Listas Positivas ya se usan en la regulación de otros ámbitos como seguridad alimentaria o medicamentos.
La punta del iceberg |
En 2023, AAP recibió 72 informes sobre animales de compañía exóticos en España, lo que supone una media de 6 animales cada mes. En 2024 esta cifra aumentó a 114, suponiendo 9 animales al mes, de media. Con la consecución del Listado Positivo se espera que la cifra pueda ir disminuyendo a medida que los animales exóticos, populares pero inadecuados, desaparezcan de los hogares particulares. Estas cifras son solo la punta de un iceberg de enormes proporciones al encontrarse cada vez más animales de compañía no tradicionales en entornos domésticos. Se estima que hay casi diez millones de animales exóticos mantenidos como animales de compañía entre España y Portugal (aves, peces, reptiles y mamíferos) de los cuales casi dos millones son pequeños mamíferos. Y mantener animales exóticos está asociado con un mayor riesgo zoonótico.
AAP aboga en España y Europa por la tenencia responsable de animales de compañía a través de Listas Positivas, como forma de regular los riesgos que implica la presencia de estos animales en nuestros hogares. Riesgos para el medio ambiente (capturas en países de origen), la biodiversidad (riesgo de especies invasoras), la seguridad ciudadana y la salud pública (riesgo de trasmisión de enfermedades). Sin olvidar los problemas de bienestar animal para los propios animales, que se ven condenados a vidas de privación y sufrimiento, en entornos y condiciones totalmente inadecuados.